Sin lugar a dudas que el SERVEL en estas votaciones no estuvo a la altura de las circunstancias y no previó las secuelas de la “megalecciones” que consideraban 4 votos y una gran cantidad de candidatos,  por lo que el coteo de votos tras el termino de las votaciones ocurridas en la tarde del domingo 27 de octubre se extendió por muchas horas.

El hecho quedó de manifiesto cuando los vocales debieron iniciar el conteo de votos en los distintos locales de votación pasadas las 18:00 horas, lo que fue extendiéndose hasta la madrugada del lunes, lo que generó molestia de los cientos y miles de vocales que habían estado ya muchas horas trabajando los dos días y que más aún debieron seguir el conteo en la misma noche sin tiempo de descanso.

Entre las palabras emitidas por muchos de ellos señalaban que no recibieron ninguna colación, o una simple fruta o un vaso de agua, menos se les entregó transporte en las horas de la madrugada, considerando que muchos de los vocales eran jóvenes nuevos en esta función, además las instrucciones de los encargados de los locales de mesa fueron deficientes a lo que se sumó los engorrosos votos de Cores y Concejales que en muchos casos eran ilegibles los nombres de los candidatos para los mismos electores.

Aquí queda de manifiesto también la nula modernización de un sistema de votación que siendo un país modernizado y tecnológico, aun el proceso es a mano y en papel, lo que expresa que sus directivos están muy atrasados en todas estas tareas.

Ya es hora de pasar del papel al celular o a una página web con clave única y que por ejemplo los mayores de 80 años no asistan a votar, pues ellos ya no están en condiciones de elegir ya que muchos deben contar con personas que los ayudan a votar.

Así SERVEL se está quedando en el pasado con una penosa administración que no proyecta nuevos cambios y mayores facilidades para votantes y vocales.